La Oveja Negra, la descarriada, la más famosa
Por Jolly Rogers
(Publicado por primera vez en el Foro Solomaquetas en diciembre de 2010, ahora revisado y aumentado)
INTRODUCCIÓN
El
hecho es que ya han pasado más de 67 años desde el fin de la 2GM y en
consecuencia ya no quedan muchos veteranos de esa dura, trágica y épica época,
ni hablar de quienes lograron meritorias actuaciones en ambos bandos y de las
condecoraciones del caso por sus actos o logros. De tal modo que haciendo
alusión por sobre todo a las personas más que al escuadrón en sí, he
establecido un parangón entre dos de los más connotados pilotos del VMF-214 y a
sus respectivas vidas y destinos tras el fin de la 2GM. Adicionalmente como de
este teatro de operaciones se habla mucho, pero he notado que –a pesar de la
bendición de Internet- realmente se sabe apenas lo justo y necesario del área,
así que agregué mapas de las islas y la locación bases desde donde operó el
VMF-214, su pintoresco comandante Gregory Boyington y también sus adversarios
nipones. Adicionalmente adiciono al final de la 2ª parte algunos datos anexos
del “Blacksheep” en el resto de la 2GM (tras el comando de Boyington) y una
pincelada del servicio en Corea de la famosa unidad.
Una
lograda estampa del binomio legendario: 'Pappy' Boyington y el F4U Corsair.
|
Iniciemos
este relato por un hecho insólito y divertido a la vez: el que varias de las
presentes generaciones de modelistas y fanáticos de la aviación conocieran al
celebérrimo escuadrón VMF-214 del Cuerpo de Aviación de Marines por el nombre
de “Tigres Voladores” y no el real de “Blacksheep”. Esta curiosa y singular
confusión de nombres con otra de las leyendas de la 2GM: el AVG (American
Volunteer Group, que peleó bajo insignias de la China Nacionalista, del Gral.
Chiang Kai-Shek) llamados popularmente "Flying Tigers" (ergo Tigres
Voladores) por su insignia de Grupo y las notorias fauces de escualo que
adornaban las proas de sus P-40B/C (a su vez copiadas de las similares del 112
Sq. RAF en Africa), se debió a la fuerte influencia del medio de comunicación
dominante durante el tercio final del siglo XX: la TV. A fines de 1976 comenzó
en USA la emisión de la serie "Baa Baa Black Sheep" (literalmente
Bee-Bee Oveja Negra), donde el doblaje mexicano al castellano para
Latinoamérica hacía mención no solo al nombre original del escuadrón sino que
agregaba por su propia cuenta el de "Tigres Voladores" (con ronca voz
en off), esto seguramente a fin de darle más 'punch' a la serie entre la
audiencia latinoamericana, una franca tontería que dio origen a la
superposición de nombres de ambas escuadras aéreas y que aún se sigue dando de
tiempo en tiempo con series anglosajonas de diversa índole.
El elenco de la serie, abajo y a la derecha junto a 'Pappy', tanto como parte del mismo y en el set de filmación |
La
famosa serie se emitió en 37 capítulos divididos en 2 temporadas desde el 21 de
septiembre de 1976 al 1º de septiembre de 1978. Fue filmada íntegramente en un
pequeño aeródromo de la localidad de Valencia en California, el Indian Dunes
Airport (designación 4CA4). Los F4U Corsair usados en la serie fueron solo 5 y
eran 2 F4U-1D, 2 FG-1D y un F4U-4B, los “chicos malos” en tanto, eran aviones
que fueron parte de la flotilla japonesa fabricada para la notable película
“Tora-Tora-Tora” de 1972. Este suave toque histórico y algunas acertadas tomas
de archivo de combate aéreo real, más las luchas coreografiadas entre los F4U
v/s los ‘Texan-Cero’ con la cercanía del Océano Pacífico para darle fondos más
creíbles a las tomas, le dio al programa la dinámica y buen sabor que hasta hoy
conserva (la han repuesto varias veces desde que fue estrenada en Chile en
1979-80), pero tuvo el inesperado alcance de tener “valor histórico” para
muchos fans del mundo aéreo, pero dicho supuesto valor, aparte del VMF-214, su
comandante y un par de personajes, amén de estar ambientado en el Pacífico Sur,
la serie carece POR COMPLETO.
Las 'Ovejas Negras', las de ficción primero y luego las reales. |
Sin
embargo, de hecho SI HAY una conexión histórica real entre el AVG y el VMF-214,
ya que el conspicuo líder del escuadrón de Marines: Gregory "Pappy"
Boyington (28 victorias según él mismo, 22 ó 24 según historiadores modernos),
si formó parte de aquel grupo de voluntarios que se presentó a luchar por China
contra Japón y además en la citada serie de TV el fue asesor histórico y hasta actuó
en 3 episodios, haciendo el papel del ficticio General Harrison Kenlay, a
saber:
-
“Deadliest Enemy of All”: 2ª parte (1977) temporada 1, episodio 16
-
“The Fastest Gun” (1977) temporada 1, episodio 24
-
“Ten'll Get You Five” (1978) temporada 2, episodio 6
LA
OVEJA NEGRA… LA LEGENDARIA
Dejemos
de lado la TV y vamos a la historia verdadera de la Oveja Negra: Gregory
Boyington. El nació en la campestre Coeur d'Alene, en Idaho el 4 de diciembre
de 1912, si Ud. buen lector toma este dato aislado verá fácilmente que
Boyington estaba una generación delante de casi todos los pilotos (de ambos
bandos) que después brillarían en la 2GM.
Boyington, como todos nosotros, sin saberlo estaba preso de sus genes,
en este caso los de su familia paterna: tanto su abuelo como su padre biológico
(Charles Boyington), se fueron convirtiendo en personas dadas a la bebida y la
violencia, no obstante tener carreras profesionales y hasta buenos ingresos.
Fue de este modo que el matrimonio de sus padres se convirtió rápidamente en
una relación amarga y disfuncional, de modo que su madre –Grace Gregory- junto
con solicitar el divorcio se mudo a Saint Maries en el mismo Idaho, allí se
volvió a casar y Gregory creció con el
apellido de su padrastro, Mr. Ellsworht Hallenbeck, hecho que después afectaría
decisivamente su vida futura.
Un
episodio en particular de su infancia marcó a Boyington, a los 6 años pasó por
su pueblo el aviador, acróbata aéreo y aventurero Clyde Pangborn (quien hizo el
primer cruce sin escalas del Pacífico cubriendo 8500 Km. desde Misawa, Japón
hasta Seattle, USA en 1931) ofreciendo –como era costumbre- vuelos populares
por unos pocos dólares. Greg fue uno de los afortunados chicos en abordar la
cabina abierta del Curtiss Jenny, solo imagine la tremenda experiencia para un
niño de esa corta edad!
Vista general del ajetreado puerto y terminal ferroviario de Tacoma, hogar de Greg Boyington durante buena parte de su juventud. |
En
1926 la familia Hallenbeck se mudó a la ciudad portuaria y ferrocarrilera de
Tacoma, estado de Washington. Allí asistió a la Escuela Secundaria y formó
parte de lo que sería una de las aficiones más grandes y perdurables de su
vida: la lucha libre greco-romana. Siendo de una familia sin grandes recursos,
Greg se pasaba los veranos en casa de sus familiares maternos en Idaho,
trabajando en aserraderos o mineras locales y después como bombero forestal en
la Asociación Protectora de Incendios de Coeur d'Alene. En 1930 ingresó a la
Universidad Estatal de Washington a estudiar Ingeniería Aeronáutica, allí se
unió tanto al Equipo de lucha de su plantel (en los campeonatos colegiales
interestatales del Pacífico se proclamó campeón de peso mediano) como al Cuerpo
de Entrenamiento de Oficiales de Reserva, su primer acercamiento con el mundo
militar.
Vista y detalle del Campus Central de la Universidad Estatal de Washington en la ciudad de Pullman. |
Se
graduó en 1934 y tras cartón se casó con su 1ª esposa, Helene Clark, y 10 meses
después nació su primer hijo (también llamado Gregory), al tiempo que se había
mudado a la capital del estado (Seattle) y conseguido empleo como dibujante
técnico e ingeniero en Boeing. En este período brillante de su vida Gregory
Hallenbeck (como siempre él creyó llamarse) era ya un Teniente 2º de la reserva
y a la sazón prestó servicio con la 630 Compañía de Artillería Costera en Fort
Worden hasta julio de 1935, fecha en que solicitó su baja para poder enrolarse
en el pequeño cuerpo de aviación de reserva del USMC, sin embargo esta decisión
lo alejaría tanto de su promisorio empleo como de su recién formada familia ya
que la etapa de formación era en Pensacola, Florida, al otro extremo del país!
Al llenar las formas y requisitos para su postulación, Greg vio que le pedían
un certificado de nacimiento y ante la imposibilidad de obtenerlo como
Hallenbeck, se comunicó con su madre y esta le dijo que al día siguiente de su
nacimiento el ala de maternidad del hospital se había incendiado y que ella
nunca obtuvo ese documento y que él debía conseguirlo en el ayuntamiento de su
natal Coeur d'Alene en Idaho. Así, pensando que era solo un trámite más, cuando
el dichoso papelito llegó a sus manos con un apellido desconocido: Boyington,
un confundido Greg hizo las consultas a su madre y de la perplejidad pasó al
shock y el aturdimiento, resultaba que todo lo que en materia familiar había
creído era falso! Pero en seguida sus genes entraron en acción y una nueva
ambición se apoderó del joven padre y esposo: la posibilidad de una nueva vida
ya no como simple cadete aviador de la reserva, sino que derechamente como
futuro aviador del USMC, ya que podía presentarse como soltero y dejar atrás su
vida como Gregory Hallenbeck. La decisión, sin embargo, no le cayó bien a su
esposa.
El viejo pero confiable entrenador básico Consolidated NY-2, aquí en versión hidro. |
En
el curso de selección y eliminación conoció a Robert Galer y Richard Mangrum,
futuros Ases y héroes de la campaña de Guadalcanal. Greg aprobó y el 18-02-’36
fue destinado a la NAS Pensacola como miembro de la clase 88-C. El entrenador
disponible era el anticuado Consolidated NY-2 (el Cuerpo de Aviación del USMC
siempre recibía material desfasado hasta la 2GM) y aunque a Boyington le costó
bastante más que el promedio de sus compañeros aprobar su primera fase de
instrucción, descubrió que realmente amaba volar. En medio de este desafío
profesional y la preocupación de estar lejos de casa, lidiando aún con saber si
había tomado la decisión correcta, el licor entró por primera vez en la vida de
Greg ¿el gatillo? La noticia cierta de que en su ausencia su esposa estaba
disfrutando de renovadas compañías masculinas y que además su grupo cercano de
compañeros de clase eran parranderos ‘duros’ a quienes llevaba meses dando
excusas para no unírseles, lo llevó a
forjar tempranamente la reputación que lo acompañaría durante todo su
servicio en el USMC: bueno para el trago, para las riñas por cualquier motivo y
pesar de todo muy popular y querido entre sus camaradas.
Arriba y abajo: biplanos 'scout' Vought O2U-1 y SU-1, ambos llamados ‘Corsair’, un nombre ligado a Greg Boyington desde sus inicios como piloto y para siempre... |
Siguió
progresando lento pero seguro en su curso de vuelo, ahora con biplanos algo más
potentes y actualizados como los Vought O2U-1 y SU-1 ambos llamados ‘Corsair’,
hasta que el 11-03-’37 obtuvo sus codiciadas alas de piloto, convirtiéndose así
en el aviador Nº 5160 del USMC, siendo destinado de inmediato a la FMF (Fleet
Marine Force) en Quántico, Virginia con el VMF-1 que en esa época estaba
equipado con cazas Boeing F4B-4. Sin embargo, aprovechó un permiso de 30 días
para ir a casa y reconciliarse con su esposa, cosa que sin duda consiguió, pues
ella quedó embarazada de su 2º hijo (Janet quien nació el 28-01-‘38) y además
se la trajo secretamente consigo hasta Virginia, pues como ya sabemos uno de
los requisitos para entrar al curso de aviador USMC era ser soltero y Greg
había logrado sortearlo con el fortuito descubrimiento de su verdadero
apellido, un truco sucio que podía costarle la carrera. Así que trato de
equilibrar ambas realidades teniendo a su familia viviendo en la relativamente
cercana Fredericksburg, mientras el seguía trabajando en Quántico.
El caza Boeing F4B-4 uno de los aviones más "potentes" y ágiles del USMC en 1937. |
El
1º-07-’37 recibió la baja del servicio de reserva del USMC y transferido de
inmediato al servicio activo de su Arma, a pesar de su persistente carácter
díscolo el joven Teniente 2º Boyington seguía progresando. En julio del ’38 fue
enviado a la USMC Basic School en Filadelfia para completar su formación como
Marine y subsecuentemente destinado al 2º MAG (Marine Air Group) en la NAS San
Diego en 1939, puntualmente al VMF-2 donde voló en Grumman F3F-2, los últimos
biplanos en servicio con el USN/USMC y se reencontró con Galer, además conoció
a otros futuros Ases: Bauer, Elrod y Kinney, demostrando de paso estar a la
altura de ellos, mientras día con día acumulaba más horas de vuelo. En febrero
de 1940 el VMF-2 participó en las calificaciones de servicio embarcado a bordo
del USS Yorktown, el grupo completo –incluido Boyington- aprobó este curso, de
modo que la Oveja Negra si sabía operar desde portaaviones (algo que seguramente
Ud. no sabía). Unos meses después fueron llevados hasta Hawai para participar
en las maniobras conjuntas del USN-USMC-US.Army que simulaban un hipotético
ataque japonés a Pearl Harbor, la guerra que ya rugía en Europa comenzaba a
hacerse una cercana realidad en el Pacífico.
El Grumman F3F-2, último biplano del USN-USMC y también para Boyington. Este es el box-art del kit Special Hobby en 1/72 (SH72106). |
Pero
a sus problemas habituales por conducta violenta y afición al alcohol, ahora se
sumaban las reiteradas deudas monetarias con colegas de toda su Base (las
cuales solía no pagar) y además líos de faldas. Así su vida seguía siendo una
montaña rusa: fue el último de su clase en ser ascendido a Tte. 1º, luego nació
su tercer retoño (Gloria, el 24-04-’40) y lo reasignaron a Pensacola como
instructor el 04-11-’40. Pero a sus crecientes deudas y actitud irresponsable
llegaron a su colmo cuando tumbó a un oficial superior en una pelea de bar por
una dama que NO ERA la Sra. Boyington (o Hallenbeck si Ud. quiere), tras la
consiguiente sanción su esposa lo abandonó definitivamente y solicitó el
divorcio, para peor sus muchos acreedores solicitaron oficialmente y en
conjunto la cobranza a través del propio USMC, amén de la demanda de su ex
mujer con lo que su engaño quedó al
descubierto. El Cuerpo de Marines le hizo un sumario y lo obligó a declarar
cada mes una distribución equitativa de su sueldo tanto para su mujer como para
la manutención de sus hijos, por lo que vio su paga administrada no por un
dictado judicial, sino por la inapelable orgánica del USMC.
LA
OVEJA NEGRA Y LOS TIGRES VOLADORES
Pero
el destino le tenía deparado otro giro inesperado: un día mientras pensaba como
afrontar sus numerosas deudas (estaba sin un céntimo a pesar de estar recién
pagado), cuando escuchó un rumor de una lucrativa oferta de trabajo para
pilotos de caza y acudió al Hotel San Carlos (un socorrido refugio de pilotos
navales con resaca) donde se entrevistó con un reclutador de una empresa
llamada CAMCO, que no era otra cosa que una fachada con la que el Departamento
de Estado trataba disimuladamente de prestarle ayuda a China en su desigual
guerra con Japón. La paga era sumamente atractiva, US$600.- al mes (el salario
USMC de la época era un poco más de US$150.-), más un bono de US$500.- por cada
avión nipón destruido y gastos pagos de viaje y estadía. Con su economía
personal en quiebra y su carrera de piloto militar en franca duda, Boyington se
anotó para el programa llamado AVG el 04-08-‘41, firmando de inmediato su
renuncia al USMC, la que fue aceptada el 26-08-’41, creyendo que se podría
reenganchar sin problemas al regreso de su “aventura asiática” (ignoraba que
sus superiores habían anotado ‘NO re-enlistar’ en su expediente).
La renuncia 'temporal' de Boyington al USMC el mismo día que aceptó ingresar al AVG. |
Su
periplo desde USA hasta oriente y sus vivencias en Birmania y China (su
pasaporte decía “misionero”) fue el primer impulso para comenzar a escribir un
libro que se transformaría años después en sus memorias. El grupo de 19 pilotos
donde iba el ‘reverendo’ Boyington salió desde San Diego para Birmania el
24-09-’41 con la situación política entre USA y Japón muy volátil y a punto del
enfrentamiento. Arribaron finalmente al campo aéreo de Toungoo, previas escalas
en Java y Rangún, el 12-11-’41 (un lugar donde, según varios miembros del AVG,
Dios puso todas las clases de bichos del mundo en cantidades infinitas); una
vez reunidos los 99 pilotos del Grupo, casi de inmediato se vieron sometidos a
un “curso de combate” impartido por el propio líder del AVG, el Gral. Claire
Chennault, cosa bien chocante para muchos de los experimentados aviadores,
muchos con más de 2000 horas de vuelo, pero Chennault tenía sus razones ya que
sabía de las capacidades y fortalezas de los nipones y además con solo
entrevistar a sus hombres supo que todos sus reportes previos de inteligencia
no habían sido tomados en cuenta, de modo que les inculcó la única táctica que
les sería útil contra los japoneses: pegar y correr aprovechando siempre
altitud superior, evitar a toda costa la clásica pelea de perros.
El Gral. Claire Chennault, hábil y estricto líder del AVG. |
Este
radical planteamiento lo enfrentó con varios de sus pilotos, en particular con
Boyington, quien directamente cuestionó sus enseñanzas. Claire Chennault era un
militar de tradición y apegado a las reglas, verse desafiado por un subordinado
no era algo que pasaría por alto. Luego estuvieron varias semanas practicando
hasta el cansancio las tácticas del “Old Man” incluyendo abrir fuego
prácticamente a “quemarropa”; hubo también varios accidentes en aterrizajes en
la primitiva pista de Toungoo, se perdieron aviones o quedaron severamente
dañados y Chennault tuvo que ordenar máximo cuidado ya que carecían de aparatos
de repuesto (eran 100 P-40B/C y punto) y los repuestos eran escasos, de modo
que impuso multas al sueldo por maniobras descuidadas que dañaran o destruyeran
un caza. Estaban en este proceso cuando el lunes 08-12-’41 llegó la tremenda noticia
del ataque a Pearl Harbor y Manila el día anterior, tuvieron luego varias
alertas de combate fallidas, pero solo 12 días después del raid a Hawai podrían
devolver el golpe a los nipones.
Boyington y sus compañeros del 1er escuadrón AVG en China (de quienes no gozaba de gran simpatía por sus hábitos pendencieros y alcohólicos), 1941. |
Boyington
fue asignado al 1er Escuadrón del AVG, “Adan & Eva” (a pesar de su
experiencia no fue nominado líder de escuadrón), el cual fue destinado a
defender Kunming, capital del asediado estado de Yunnan, en el sur-oeste de
China en el borde norte del lago Dian y conocida como “la ciudad de la
primavera” por su clima templado. El vuelo por las montañas que dividían ambas
zonas fue difícil y azaroso, debido a los fuertes y cambiantes vientos sumados
a mapas de mínima y pobre calidad. La situación en tierra no era auspiciosa
pues la ciudad era el bastión de Chiang Kai-shek y pronto debería afrontar el
grueso de las fuerzas japonesas, y si Birmania caía toda ayuda futura llegaría
solo vía aérea a través de la misma traicionera ruta que los ligeros P-40 del
AVG acababan de sortear. Pero a pesar de los millones de moscas del lugar, las
instalaciones del aeródromo eran mucho mejores (incluso había un campo de
Béisbol) y hasta contaban con un sencillo pero efectivo “sistema de alerta
temprana” implementado por los chinos: observadores en localidades clave en
torno a Kunming y que avisaban oportunamente por radio o teléfono la llegada de
los aviones del sol naciente.
Las
cosas fueron mal para Boyington, pues el glorioso día 20-12-’41 cuando su
escuadrón interceptó a bombarderos japoneses provenientes desde Hanoi él no
alcanzó a coger ninguno de los P-40 del campo y se quedó rabiando en tierra.
Tras la notoria victoria, Kunming estuvo en paz por semanas y el AVG solo tenía
acción junto a la RAF en el frente birmano. Como la situación allí empeorase,
Boyington y algunos pilotos fueron enviados al campo secundario de Mingaladon
el 25-01-’42 y al día siguiente enfrentaron a una gran formación de cazas KI-27
del Sentai Nº 50, pero como el líder de vuelo del AVG fuese un novato
(Boyington no fue considerado para el puesto) los puso erróneamente debajo de
la escuadra enemiga, perdieron toda oportunidad de sorpresa contra los ágiles cazas
de la IJAAF, de hecho Boyington luchó contra 3 de los ‘Nate’ y ninguno de sus
trucos o maniobras pudo superar a los nipones, a duras penas rompió el contacto
y volvió a su base con su caza agujereado, herido y su ánimo quemado. Tres días
después -el 29-01-’42- Boyington se tomó revancha y ahora, contando con la
sorpresa y la altitud de su parte su escuadrilla, de 10 P-40B atacó a 20 Ki-27
y en la subsiguiente melee, los ahora favoritos de la propaganda aliada
reclamaron 16 derribos (los japos reconocen 8) de los cuales Boyington se
adjudicó 2, sin embargo como su Tomahawk no estaba cargado con película para
registrar su logro y tampoco tuvo testigos directos de los hechos, ya que todos
tenían “las manos llenas”, le fueron anotadas solo como probables y claro, no
se las pagaron.
Dos vistas del clásico emblema del AVG, un tigre alado saltando desde una V (de victoria), como otras coloridas insignias de los servicios aéreos de USA este fue obra del estudio Walt Disney. |
Dos imágenes de parches de hombro de la insignia del 1er escuadron AVG 'Adan y Eva', el primero en verde el color más usual y con el jocoso lema del mismo "la primera persecusión" (de Ella hacia El). |
El
03-02-’42 el 2º escuadrón –Osos Pandas- y los pilotos de refuerzo del 1er
escuadrón fueron enviados a Kunming ya que el ejercito japonés estaba ahora
solo a 320km, al tiempo que la defensa de Birmania vivía sus momentos finales.
Así, el 06-02-’42 la diosa fortuna le sonrió a Boyington y durante un ataque a
la ciudad por 36 aviones japoneses, obtuvo sus únicas 2 victorias aéreas
confirmadas (a las que sumarían 1,5 aparatos destruidos en el suelo reconocidas tras el raid a la base japonesa
de Chiang Mai, 24-03-’42).
P-40C # 21, 1er escuadrón AVG, Kunming 1942. Montura habitual de Greg Boyington, en este caza obtuvo sus únicas 2 victorias aéreas confirmadas (y pagadas). |
Sin
embargo Greg no vería ni un dólar de esas victorias en tierra, como tampoco
ningún puesto de comando a pesar de sus notorias habilidades de vuelo y
combate, sus malas costumbres (borracho, peleador y don Juan) le negaron esa
posibilidad y dieron lugar a varios vergonzosos episodios (como llegar tarde a
una alerta el 15-02-’42) y hasta trascendió que él tenía un supuesto ‘affaire’
con la bella esposa del XO (oficial ejecutivo del AVG y ella secretaria del
Grupo), Olga Greenlaw. Ella, en su libro ‘The lady and the Tigers’ de 1943, se
refirió a Boyington así: “era el más rudo del grupo y a muchos de ellos los
atemorizaba un poco”, en otro pasaje posterior se refiere a las continuas
visitas del piloto “se como estar con un hombre si el me gusta” (sin
comentarios!).
La bella Sra. Olga Greenlaw, objeto de los afectos de Greg Boyington, a la derecha abrazada a su marido, el 2º al mando del AVG, en Kunming viendo el retorno de los cazas del Grupo. |
Este
embarazoso entredicho lo puso de nuevo en la mira del Gral. Chennault y se le
sumó un hecho inexcusable: el 28-02-’42 el matrimonio Kai-shek ofreció un
banquete de honor al AVG, a quienes consideraban los “ángeles guardianes de
China”. En consecuencia, Chennault ordenó que todos los pilotos presentes en
Kunming asistiesen y que se abstuvieran de beber alcohol hasta después de la
cena. Boyington no solo no asistió a la celebración sino que se quedó bebiendo
hasta la casi inconsciencia con un compañero de escuadrilla en el bar del mismo
Hotel donde se daba la citada cena de honor; el caso es que terminada la
comida, Chennault en persona los halló en ese deplorable estado y no les dijo
absolutamente nada, pero para todos fue evidente que los días del ex-marine en
el AVG estaban contados.
El
infortunio o la desaplicación (o la suma de ambos) le siguieron jugando en
contra cuando fue designado para escoltar el avión del Generalísimo Chiang
Kai-shek y su esposa hasta la localidad de Chanyi, unos 130km al este de
Kunming. Ese 05-03-’42 todo fue tranquilo para los cinco P-40 que componían la
escolta en la ida, pero tras recargar, en la vuelta comenzó el problema.
Boyington era –por fin- el líder de vuelo y quizá la fastidiosa misión (Greg
solo quería volar para pelear) lo hizo sojuzgar un factor creciente a lo largo
del curso de regreso: el viento del norte. Al final se terminaron desviando
unos 320km al sur-este de Kunming y se quedaron sin carburante, viéndose
forzados a aterrizar “de panza” en unos sembrados, quedando 3 de los 5 Tomahawk
muy averiados. Chennault se puso furioso al saber la noticia y desesperado
despachó un equipo de mecánicos y repuestos. Hay que recordar que solo unos
días antes había caído Rangún y en la debacle el AVG se había visto obligado a
dejar atrás unos 15 aviones por falta de refacciones, no podían permitirse
ahora la pérdida de 5 cazas en buen estado! En el aterrizaje forzoso Boyington
sufrió heridas en ambas rodillas y la cabeza, pero cuando llegó la partida de
salvamento y pudo –tras mucho trabajo- recuperar 3 de los aviones y desarmar
para piezas y repuestos los otros 2, Greg se ofreció para liderar los cazas en
buen estado hasta Kunming, tras un breve chequeo médico, despegó y llegó a
salvo con los 3 cazas remanentes, aunque recibieron una cálida recepción,
ninguno de sus superiores lo felicitó tampoco.
Luego
vino el masivo bombardeo japonés a las instalaciones del AVG en Magwe (en la
frontera de Birmania y China), que destruyó lo poco rescatado de Rangún y
Toungoo, dejando así Birmania en poder del Imperio del Sol Naciente. Con los
japoneses cerrando el cerco, Chennault planeó la famosa incursión a la
importante base de la IJAAF en Chiang-Mai, la cual estaba fuera del radio de autonomía
de sus P-40B, de modo que se designó un grupo de 10 pilotos escogidos y se los
despachó el día previo en parejas hasta pequeñas bases satélites más cercanas
al objetivo. A pesar de todo Boyington estaba entre ellos y cuando recién
amanecía ese 24-03-’42 picó hacía los Ki-43 y otros aviones alineados al
costado de la pista, destruyendo en solo 6 minutos al menos 7 aparatos. En ese
breve lapso los nipones ya habían reaccionado y la antiaérea de todo tipo
llenaba el aire repeliendo el demoledor ataque, de modo que habiendo perdido el
factor sorpresa los Tigres Voladores se retiraron de Chiang-Mai dejándola
convertida en un ruinoso espectáculo.
Se
perdieron 2 cazas, murió 1 piloto (Newkirk) y otro saltó en paracaídas sobre
Thailandia (McGarry) quedando preso hasta 1945. Al regreso, todos sacaban
cuentas alegres, también Boyington, pero se halló con la desagradable sorpresa
que les reconocieron en total como grupo de ataque 15 aviones destruidos y a el
en particular solo 1,5 aparatos confirmados. La cifra de solo 15 naves enemigas
aniquiladas (incluyendo sin saberlo 2 Hurricane capturados) le sonó a venganza
a Greg, sintió que le estaban pasando la cuenta por todos los problemas locales
con su jefatura. Hasta el día de su muerte sostuvo la figura de 7 y no 1,5
aparatos destruidos por él esa mañana de primavera y es probable que tenga
razón, dadas las cifras reclamadas por los otros miembros del raid (40 en
total) versus la cantidad de aviones reportados por los espías aliados antes y
después de la incursión, amén de la declaración oficial de Chennault a los
exultantes medios aliados, que reportó 30 aviones destruidos (quizá no tenía
cash para pagar por los US$15,000.- en bonos).
A
pesar del resonante éxito en Chiang-Mai el mes de abril fue mal en peor para
los Tigres Voladores, con frecuencia contaban con solo 12 o 18 aviones operativos
a lo sumo para hacer sus misiones y los hombres provenientes del frente birmano
pedían a gritos un descanso. Para colmo les comenzaron a ordenar cada vez más
misiones de apoyo estrecho a favor del ejército chino, equipados solo con sus
ametralladoras y ningún tipo de bomba, lo cual deterioró aún más la moral del
Grupo, incluso hubo un asomo de motín, pero Chennault logró aplacarlo. Sin
embargo la noticia de que el 1º de julio serían asimilados a la USAAF y que sus
bonos y privilegios se acabarían, terminó por apagar el poco espíritu restante
de los Tigres Voladores. Boyington, por su parte, sentía rechazo por esa medida
ya que siendo un Marine, es lo que seguiría siendo y le envió 2 notas de
protesta al respecto a Chennault, quien ni siquiera acusó recibo de ellas.
Un
último y enojoso episodio fue protagonizado por Boyington, durante una alerta
de ataque aéreo tomó un P-40 desde el área de mantenimiento y ebrio como estaba
lo taxeó erráticamente por la pista y sin lograr elevarlo cayó en un arrozal al
final de la pista, luego abordó raudamente un vehículo cercano antes de que los
enfurecidos mecánicos lo atraparan. En su posterior reporte Boyington adujo
falsamente que el caza carecía de potencia.
Sin
embargo, a pesar de esto fue una carta de su madre (su familia lo necesitaba
urgente en casa) y no su irresponsabilidad la que decidió finalmente su salida
del AVG el 21-04-’42. Tras una agria reunión con Chennault, en que el duro
comandante no le dio opción alguna, le recibió la renuncia de Greg y le dio una
baja deshonrosa. Así que con los japoneses dominando el Pacífico, debió salir
para Calcuta en un C-46 a través de los Himalayas, en un agitado y peligroso
vuelo descrito por él mismo como “el peor de su vida”. De Calcuta pudo salir a
Karachi, Pakistán, donde aparte de serle negado transporte a USA, se encontró
con una “recomendación” de Chennault para que oficiales de la USAAF lo
enlistaran en la 10ª Fuerza Aérea; sintiéndose perseguido por su aún iracundo
ex-jefe compró de su bolsillo un boleto en un mercante neutral, el SS Brazil,
el cual zarpaba a Nueva York en pocos días.
LA
HORA SEÑALADA: LOS BLACKSHEEP ENTRAN EN ACCIÓN
Así
arribó a la gran manzana el 13-07-’42 y casi de inmediato se dirigió a
Washington DC donde se entrevistó con los altos mandos del USMC y logró ser
reintegrado a las filas del Cuerpo (fue perdonado básicamente debido a la grave
escasez de pilotos con real experiencia de combate) y aprovechando su renovada
valía fue destinado 6 meses después a Nueva Caledonia. En el intertanto debió
retornar a Seattle para hacerse cargo de la manutención de sus 3 hijos, ya que
tras el fallo judicial que le quitó la tuición de los mismos a su ex, Helene
(por alcoholismo, increíble), la madre de Greg no podía sola con las cuentas,
de modo que él tuvo que trabajar de aparcador de autos mientras le reasignaban
salario y esperaba ordenes. Al fin, el 07-01-’43 Boyington salió (nuevamente)
de USA para asumir como Mayor en el MAG-11 en Espíritu Santo, un puesto de
comando administrativo que no llenaba las expectativas de acción de Boyington,
ver papeleo de personal nuevo o de baja
y contar aviones no era lo suyo! Se las arregló para ser transferido al
VMF-122 como Oficial Ejecutivo, ya que un camarada de la escuela de vuelo del
USMC estaba en esa unidad equipada con los F4F Wildcat y que pronto recibiría
los nuevos F4U-1 Corsair.
Un F4F-4 Wildcat del VMF-122 en Camp Kearney (San Diego) en 1942, justo antes de salir a su tour de servicio al Pacifíco Sur. |
Tras
un periodo de poca acción real de combate sumado a una caída accidental durante un
match de lucha libre que le costó una fractura leve en una pierna, (evento que
de todos modos lo mandó a un hospital en Nueva Zelanda), la mala suerte parecía
perseguir a Boyington, pues justo cuando fue baja médica, el VMF-122 tuvo una
fuerte racha de combate y se anotaron 35 victorias en unas semanas.
Aquí
hay que hacer un alto en la historia y reconocer que a pesar de toda su falsa
mitología la serie de TV tenía dos personajes basados en la realidad (aparte de
Boyington mismo): su Némesis el Coronel Joseph Smoak (Col. Lard en el show) y
el Brigadier Gral. James ‘Nuts’ Moore (mismo nombre en TV), comandante de la
1st Marine Air Wing en Espíritu Santo. Por un lado estaba Smoak quien conocía a
Boyington desde la escuela de vuelo en Pensacola y sabía bien de su carácter
irresponsable y pendenciero, ergo quería deshacerse de él a toda costa y por el otro estaba
Moore quien necesitaba un líder de caza fuerte ante la ausencia obligada del
frente de Foss y Galer, y que además creía en el talento de vuelo de Boyington
no obstante sus inconductas.
El
archipielago de las Nuevas Hébridas, al noroeste de Australia, siguiente parada
de Boyington, puntualmente la isla mayor Espiritu Santo y Turtle Bay la base
del USN-USMC.
|
Así
fue como Greg recibió a su regreso la misión de reformar el escuadrón VMF-124
(ojo!) para el cual habían cazas F4U-1 disponibles pero no pilotos. Fue en ese crucial momento, cuando recordó el
tedioso papeleo de recursos de personal aéreo en el MAG-11, se dio cuenta del
número no menor de pilotos que deambulaban por el teatro de operaciones
sin asignación a ninguna unidad, no por
ser rechazados, sino por los inevitables retrasos administrativos propios del
lejano frente. En agosto de 1943 logró reunir un grupo de 27 de esos pilotos
sin destinación por motivos varios y conformó adecuadamente la unidad con todo
y staff ejecutivo. Así en los primeros días de Septiembre la unidad llegó a su
área de entrenamiento operacional: Turtle Bay en Espiritu Santo (Spiritos
Marcus en la serie de TV) en el grupo de islas de Nuevas Hébridas. En ese
período el escuadrón recibió el cambio de designación a VMF-214 como resultado
del complejo (y nada raro sin embargo) sistema de cambios de designación del
USN Bureau, implementado para negar lo más posible a los japoneses la
identificación de las unidades destacadas en cada sector del frente. Pero de
hecho el VMF-214 era un escuadrón creado el 1º-07-’42 y se hacían llamar los
“Swashbucklers” (Aventureros o Espadachines) que había sido inactivado tras
perder en combate a su Comandante y ahora estaban de descanso obligatorio en
Australia y que al regreso serían repartidos como refuerzos en varias unidades.
Esta
y todas las fotografías que siguen a continuación son únicamente del período de
entrenamiento de las "Ovejas Negras" en Espiritu Santo,
agosto-septiembre de 1943.
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Dos vistas del Corsair 'birdcage' asignado al Tte. Edwin Olander, que después también ocuparía 'Pappy'. |
La
primera foto oficial del VMF-214 tomada al final de su entrenamiento en
Espíritu Santo.
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Esta imagen corresponde a una de las pistas de dispersión secundaria en Guadalcanal, escala obligada tanto de escuadrones rumbo al frente como de aviones y pilotos de refresco. |
Uno de esos visitantes de paso en Guadalcanal: el Tte.1º Paul A. Mullen del VMF-214, en agosto del '43 |
Los
Marines habían desembarcado en Rendova el 30-6-'43, parte del grupo de las Nuevas Georgias, iniciando una agresiva y rápida campaña de conquista del archipielago, era evidente que los escuadrones de caza y bombardeo aliados ahora basados en las Rusells pronto serían reposicionados allí. Ahora, al hacer clic sobre la imagen para
agrandarla, por favor note la expresión de extrema tensión en la cara de los infantes, bien
lejos de las gallardas aposturas de las antiguas películas de Hollywood sobre la Guerra del Pacífico y muy
cerca de lo reflejado en la serie de HBO 'The Pacific'.
Sección del mapa de Nueva Georgia que muestra Punta Munda y la base nueva del VMF-214. |
Arriba y abajo el ruinoso aspecto de Munda tras el asalto y toma por el USMC, desde aquí operaron en su primer tour de combate los 'Blacksheep' |
Tras
limpiar el terrible desastre tras la batalla (como siempre) los 'Sea-Bees'
construyeron esta funcional base al lado del mar, desde allí operaron el VMF-124,
212, 214,215 y 216 en principio.
|
Un
día de trabajo habitual en la 'oficina' de Munda...
|
Los chicos del VMF-215 'Fightings Corsairs' (que también ameritan un artículo aparte) calientan motores en Munda en octubre de 1943. |
Otro Corsair, esta vez del VMF-124 aterriza en Munda, nótese los grandes charcos tras un fuerte chubasco tropical. |
Uno
de los Corsair 'birdcage' del VMF-214 sometido a mantención en Munda. Esta foto
refleja muy bien la expresión "condiciones primitivas de operación".
|
Ahora,
la serie de TV de los '70 se basó muy VAGAMENTE en las memorias del mismo
Boyington y a pesar de contar con Boyington en persona como asesor
"histórico-militar", prácticamente NO HAY ningún hecho verídico en
ella (aparte de los 2 oficiales superiores ya citados) creando mucha mitología
sobre la escuadrilla, pero sobre todo acerca de la calidad del grupo humano que
lo conformó durante ese especial período de 3 meses y 2 tours de combate. Esto
le valió al díscolo Boyington ganarse una renovada gran fama entre el público
estadounidense y hacerse muy conocido en gran parte del planeta, pero le
granjeó al mismo tiempo la enemistad de muchos de sus antiguos camaradas de
armas, al ser expuestos falsamente en la serie de TV como una banda de
indisciplinados y amigos del trago (como el mismo lo era en resumen).
Es
durante el primer tour de combate que ‘Pappy’ se anota la mayor cantidad de
victorias aéreas consecutivas y consigue logros notables como derribar 5
enemigos en su primer día al mando o derribar 3 cazas nipones en solo 16
segundos. Hay varias anécdotas que por si solas dan para un artículo y por
supuesto para maquetear una de sus muchas monturas.
Ballale, el pequeño islote fortificado y base aérea del IJN, escenario de la primera misión del VMF-214. |
Líneas aparte, una cuestión que muchos me consultan es sobre "el avión" del connotado mayor del USMC en esas notables misiones; la verdad es que 'Pappy' no tuvo un avión principal en particular, ya que dado los escasos medios de que disponían en las islas cada piloto se montaba en el caza que estuviese en óptimas condiciones, es más Boyington solía pedir para sí mismo el F4U en peores condiciones de mantenimiento, dejando los más buenos para sus mejores pilotos. De tal modo hay por lo menos 4 Corsair que han sido identificados positivamente como sus monturas de oportunidad, helas aquí:
Los
dos primeros Corsair han sido datados en Vella Lavella (Vella LaCava en la
serie de TV) durante diciembre de 1943, el tercero en Munda en septiembre del '43 y el cuarto y
último F4U-1A (#915) confirmado para Boyington en enero del '44, pues en él fue derribado sobre
aguas cercanas a Rabaul. Alguno se preguntará sobre el célebre y conocido N° 86
"Lucybelle" (y no ‘Lulubelle’) con las clásicas 20 banderitas niponas
al costado de la cabina, bien ese aparato se usó solo con fines
propagandísticos cuando la unidad regresó de su descanso en Sidney (con
alcances parecidos a los vistos en la serie de HBO "The Pacific") y
estuvo de paso de nuevo por Espíritu Santo, allí les hicieron una sesión de
fotos para la cual ya estaba preparado el famoso y llamativo Corsair.¿De dónde
el nombre? De Lucy Malcolmson, una Srta. a quien Greg conoció, cortejó y
prometió matrimonio a bordo del barco rumbo a Birmania con los futuros ‘Tigres
Voladores’ y con la cual mantenía ahora una relación a distancia, le enviaba
todo su sueldo para la manutención de sus 3 hijos con su primera esposa, Helene.
El lindo (y falso como billete de 3 lucas) Corsair # 86 y en la imagen de abajo, el famoso bateador que (probablemente) hizo el publicitado trato de gorras autografiadas a cambio de victorias. |
Lo
concreto es que allí como parte del aparataje publicitario Yankee, había
presente un afamado jugador de Beísbol (probablemente Stan Mucial, bateador
estrella de los Cardenales de Saint Louis, campeones de liga 1942-43 y quien se
enlistó en el USN) quien hizo un trato con Boyington frente a las cámaras. El
deportista les daría gorras autografiadas a cada miembro del VMF-214 si el
Mayor accedía a mandarle las banderitas de sus victorias personales, Boyington
estuvo de acuerdo e hizo además gala de su reputada fanfarronería de bar y
apostó además que por cada gorra autografiada que les enviaran desde USA su
escuadrón derribaría 5 aviones enemigos… la verdad no se cuantas gorras
recibieron finalmente (ya que en efecto las recibieron) y si la apuesta se
cumplió o no. En fin, luego Greg se tomó las conocidas fotos abordo del #86,
más otras con todo el VMF-214 luciendo sus gorras y bates ya autografiados por
el jugador estrella y sería todo! Al día siguiente salieron para Munda y Greg
Boyington nunca más volvería a ver al Corsair al que el llamó
"Lulubelle" en sus memorias (reitero se llamaba
"Lucybelle"), pero Boyington modificó el nombre para no incomodar a
su verdadera 2ª esposa, ya que tuvo que librarse con un juicio de la insistente
Lucy. He aquí parte de la sesión de aquel día:
Sonriendo
para las cámaras Greg Boyington, inicia un mito en torno a un aparato en que
NUNCA voló, ni menos combatió alguna vez. La flecha naranja indica la 'Y' del
nombre "LUCYBELLE".
|
El Tte. Jim Hill, aprovechando el distendido ambiente de aquel día, también se tomó una foto abordo del adornado Corsair. La flecha amarilla sigue mostrandonos la 'Y' de Lucybelle. |
Y
como prueba adicional del acuerdo ya relatado, otras 2 fotos más: la primera es
posada para la prensa del USMC, con Boyington montado en una de sus habituales
cabalgaduras (el # 740), entregando alegremente sus calcomanías de victorias (a
cambio de gorras de Beísbol) al Tte. Chris Magee para que se las envíe al
jugador estrella (o a los jugadores que aceptaron el desafío de las gorras
autografiadas). La 2ª es una rara foto en color del mismo # 740 que varias veces
usó el As.
La pista de Vella Lavella, un día cualquiera de fines de 1943. |
El Mayor USMC Gregory Boyington en Vella Lavella tras una misión a Buka. |
"Uno
más" indica el Mayor Boyington con el dedo índice en alto.
|
El
Corsair 'birdcage' del Tte. Olander, también usado por Boyington, aquí
mandando al olvido a un A6M.
|
Una
copia de las ordenes del día para el VMF-214 en una jornada de rutina.
|
Situémonos
ahora entre los últimos días de diciembre de 1943 y los primeros días de enero
de 1944, el VMF-214 y en particular su comandante han pasado un período largo
sin enfrentamientos aire-aire y han estado prestando apoyo aéreo durante la
toma y conquista de Bouganville. Ahora se hayan encabezando una renovada y dura
ofensiva contra el bastión japonés de Rabaul (Lakunai) en Nueva Bretaña y sus
bases satélites (Kevarat, Tobera, Vunakanau y Rapopo), en un continuo ir y
venir desde Vella Lavella, ya fuere escoltando bombarderos medios de la USAAF
(B-25 Mitchell, B-26 Marauder), bombarderos medios y ligeros del USN/USMC
(PB-1J, Avengers & Dauntless), o fuere conformando grandes formaciones
mixtas con otros caza-bombarderos aliados (P-40M/N RNZAF) para destruir todo lo
posible las fuerzas aéreas japonesas presentes o simplemente haciendo miserable
la vida de la ya maltrecha navegación enemiga que se aventuraba al largo del
canal de San Jorge saliendo o entrando desde Simpson Harbor. Como su base en
Barakoma (Vella Lavella) estaba más lejos de Rabaul que la recién inaugurada
Torokina en Bouganville, el agresivo y competitivo 'Pappy' no estaba dispuesto
a ceder terreno en el conteo de victorias ante los 5 escuadrones de Marines
ahora destacados allí, de modo que presionaba la acción de su unidad al máximo.
La zona de operaciones. Las bases japonesas y las aliadas según iba avanzando el frente (o retrocediendo según los nipones). |
Aquí
la ubicación del asediado bastión de Rabaul y la ubicación de sus bases
satélite.
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La vívida visión de Robert Taylor para uno de los incontables duelos sobre Rabaul, aquí 'Pappy' bajando otro A6M en llamas del cielo de Nueva Bretaña. |
Los Mitchell navales, PBJ-1D, del VMB-433 tras su pase sobre Rabaul... |
Este
logrado arte de Nicolas Trudgian representa uno de los raids a Rabaul en los
que participó el VMF-214.
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¡Vamos
todos contra Rabaul! Aquí parte de las fuerzas aliadas, cazas P-40M del 15º Sq. de
la RNZAF.
|
Los atacantes de Rabaul provienen también del océano, aquí un SBD-5 Dauntless del USS Saratoga vuelve a su nave madre, tocado tras un raid de bombardeo al "Gibraltar del Pacífico". |
El 2 de noviembre del '43, la USAAF atacó Simpson Harbour en Rabaul y a las unidades de la IJN fondeadas allí, aún escoltados por P-38 y F4U los B-25J sufrieron fuertes pérdidas. |
Arriba y abajo: Bombarderos Mitchell de la USAAF y el USN en diferentes misiones de hostigamiento a las bases principales y satélites de Rabaul. |
"¿Are you looking for trouble? You coming
to the right place!" (Elvis Presley, King Creole), 'Pappy' Boyington en un dogfight contra un
A6M3 tipo 22 sobre Simpson Harbor, diciembre 1943.
|
Si
bien ir hasta Rabaul fue siempre un negocio peligroso, justo antes de comenzar
el 214 sus visitas al enclave japonés, estuvo operando desde esa base EL MEJOR
piloto de caza de todo el Pacífico: Hiroyoshi Nishizawa (103 victorias
reclamadas, 87 confirmadas) y cuando fue destinado a Japón en septiembre del
’43, llegó a tomar su lugar de caudillo del aire un piloto igual de terrible y
capaz: Tetsuzo Iwamoto (202 victorias reclamadas, + de 80 confirmadas) ambos
hombres reales e ilustres que dieron dura batalla a la superioridad de medios
aliada y que ejemplifican lo difícil de los combates sobre la zona de Rabaul,
mucho mejor evocarlos a ellos que al enemigo ‘comparsa’ ficticio de Boyington
en la serie de TV: el Capitán IJNAF Tomio "Tommy" Harachi
(interpretado por Byron Chung).
El bastión japonés de Rabaul en detalle.
|
Nishizawa,
el "Diablo de Rabaul", un apodo bien merecido, sus 87 'kills' así lo
atestiguan.
|
Una
de las pocas monturas identificadas para Nishizawa, un A6M3 tipo 22 del 251 Ku
en Rabaul, 1943.
|
Dos vistas del mismo 'Zero', en foto arriba y luego abajo bellamente imaginado por el artista Shigeo Koike en box-art para la marca Hasegawa. |
Un kokutai completo de refuerzo fue desplegado desde el portaaviones Zuikaku en Bouganville, pero la enorme presión y superioridad numérica de los aliados los obligó a replegarse a Rabaul. |
Distintas
vistas de diferentes tipos de Zeros y escuadrillas desplegadas en Rabaul.
|
Tetsuzo
Iwamoto, su prematura muerte en 1955 nos impidió saber más de él. pero lo
sobreviven sus memorias.
|
El box-art de Hasegawa para su A6M2 en 1/48 con la versión "Súper Ace" de Iwamoto en el 253 Ku en Rabaul, esta caja incluye la figurita en la misma pose de la tapa. |
Este A6M3 es una de las monturas ocasionales atribuidas a Iwamoto. |
Volviendo
al 214 y las fuerzas aéreas aliadas, el duro trabajo comenzaba a dar buenos
frutos: los japoneses estaban al borde del colapso. Si bien la campaña
terrestre de Cape Gloucester (del otro lado de Nueva Bretaña) no había
resultado del modo planeado por los mandos estadounidenses, igualmente redundó
en la retirada de las tropas niponas y bases aéreas hacia la península de
Gazelle, donde precisamente está Rabaul, sumado a las pérdidas diarias de
barcos de suministros para dicha base, la presión se hacía insostenible. Sin
embargo, toda esta pesada actividad comenzaba a pasarle la cuenta al VMF-214,
ya que entre diciembre del '43 y el 2 de enero del '44 el escuadrón perdió 6
pilotos, entre ellos al Mayor Pierre Carnagey (XO de la unidad el 23-12-'43),
esto afectó a Boyington, quien ya había entrado en sus treinta y a pesar de su
espíritu combativo mostraba ya evidentes signos de fatiga. Algo sencillo de ver
si tomamos en cuenta los 21 años promedio de sus subalternos (de hecho la
prensa yankee lo había apodado "Pappy": Abuelito o Tata, cosa que le
hacía poca gracia), a pesar del éxito cosechado, la carga de trabajo lo tenía
más cascado que al resto.
Vista
aérea de la península de Gazelle y la bahía de Rabaul desde un F-5B Lightning de reconocimiento.
|
"Another one bites the dust" (Queen, The Game) Boyington vencedor en un duelo 'nariz contra nariz' sobre Rabaul. |
Pappy
en Barakoma, Vella Lavella, de regreso de una misión.
|
Arriba y abajo: los efectos del constante bombardeo de la 5ª AF y los aviones del USN, se alcanzan a ver (aparte de los Ki-46 II) los restos de un Ki-57 'Tópsy' y un Ki-45 'Nick'. |
Boyington da las últimas ordenes y repasa instrucciones a sus 'Blacksheep' |
Ahora,
sumado al cansancio acumulado, él arrastraba una rebelde otitis por casi 2
semanas, la cual lo había privado de participar en algunas misiones
importantes, viendo así como su propia cuenta de victorias se estancaba,
mientras la de sus compañeros de escuadrón y otros colegas de unidades del USMC
crecían día con día, peor aún la unidad "rival" de los Marines, el
único escuadrón del USN basado en tierra y equipado con Corsairs, el VF-17,
estaba en una racha de victorias inmejorable. Ese fatídico 3 de enero de 1944,
la cosa no había comenzado mejor: la otitis le tenía supurados ambos oídos y le
había hecho pasar una noche de perros. De modo que al amanecer solo dio las
instrucciones previas a la misión de aquel día (escolta y después caza libre) y
se tuvo que contentar con ver partir a su unidad en pos de los cielos de Rabaul
bajo el mando de su nuevo XO, Henry Miller.
En
ese momento, parecían haber quedado atrás los días en que había derribado 5
adversarios en un solo combate durante su primera misión, o cuando volando en
círculos sobre Kahili había insultado en japonés a los mismísimos aviadores
nipones que se habían negado a despegar y presentar batalla, derribando a
algunos que aceptaron el reto. Quizá estos emotivos recuerdos (es un hecho que
Boyington siempre fue impulsivo), sumado a tratar de superar y vengar las
pérdidas humanas de los últimos días lo que lo llevó a tomar lo que sería su
antepenúltima decisión en la guerra. Sintiéndose mejor y con renovado ánimo de
“buscar pelea”, le ordenó al Capitán George Ashmun que preparara su F4U para
acompañarlo en pos del resto del escuadrón. Sin embargo, se presentó un
problema de último momento: su propio Corsair (#883 probablemente) tenía una
avería no solucionada. Valiosos minutos transcurrieron hasta que lograron
ubicar un F4U en condiciones para emprender el vuelo, de hecho hay una versión
que afirma que Boyington le pidió prestado su Corsair al As Marion Carl, CO del
VMF-223 (un tipo con tantos o más méritos que Boyington), pero tal aserto nunca
lo he podido confirmar a cabalidad; lo cierto es que Boyington despegó unos 15
minutos después que su unidad en el F4U-1A signado con el numeral 915.
En
su amena autobiografía ‘Pappy’ afirma que él lideraba esa misión desde el
principio, algo reñido con los hechos tal como siguieron. Para cuando él y
Ashmun arribaron a la zona del canal de San Jorge, al largo de Nueva Irlanda,
los acontecimientos estaban en pleno desarrollo: vieron una formación de 6-8
cazas enemigos solo 1500 pies abajo, en curso perpendicular al suyo, viendo la
oportunidad de tomarlos por sorpresa, antes que buscar reunirse con su unidad
(el afirma que los venía guiando y que no lo siguieron por una nubosidad baja
que se interpuso, pero no explica certeramente como fue eso) Boyington tomó su segunda
y penúltima decisión de ese día: de inmediato picaron sobre los japoneses,
haciendo estallar en llamas al primero (tras una larga ráfaga), sin embargo al
recuperar y nivelar su picada, ambos Marines se hallaron primero enfrentados a
los zeros q’ ya habían visto, pero a los que en instantes se les unieron otros
A6M cercanos hasta enterar 20 aparatos; En ese momento, quizá seguro de atraer
la atención y ayuda del resto del VMF-214 (ciertamente los escuchaba por la
radio), el conspicuo Mayor no intentó romper el contacto con la superior
agrupación nipona y les hizo frente, ESA fue su tercera y última decisión de
comando en la guerra y fue muy mala. En el subsiguiente combate, Boyington se
anotó 2 victorias más y Ashmun una, pero pronto las cosas dieron un giro
mortal, Ashmun fue alcanzado repetidamente y su F4U comenzó a dejar una negra
estela de humo y a perder altura, 'Pappy' se fue encima de los perseguidores de
su wingman regándolos con sus seis .50, obligándolos a dispersarse, más era
tarde; Ashmun no respondía a los repetidos llamados de su líder, estrellándose
poco después en las aguas del canal de San Jorge, peor aún, el afán protector
de Boyington lo expuso al fuego directo de al menos 2 cazas enemigos que
acribillaron de nariz a cola a su Corsair.
En
este momento, fue cuando Boyington decidió para sí que ya había tenido
suficiente, y picó veloz hacía unas nubes bajas, solo para hallar que estas
estaban casi a ras de mar teniendo que nivelar su curso ya sobre las olas; con
todo la potencia del Corsair le había dado una buena ventaja sobre los zeros y
parecía que se saldría con la suya, cuando de pronto la sección del motor
estalló en llamas y así -oprimido por el tremendo calor del incendio- 'Pappy'
tuvo que amerizar violentamente su F4U justo a la mitad del canal de San Jorge.
Seriamente herido y con algunas quemaduras, Boyington se las arregló para salir
del derrelicto caza y lanzar la balsa auto-inflable de emergencia lejos del
naufragio. Mientras nadaba hacia la balsa, llegaron los zeros que comenzaron a
dispararle de inmediato. Vista ahora en perspectiva esta saña se entiende (no
se justifica) desde el momento mismo en que los pilotos japoneses distinguieron
claramente por la radio la voz de este uno de sus más odiados enemigos.
Cuando
un herido Greg Boyington se preparaba ya para su cita con San Pedro, los
nipones cesaron repentinamente sus ataques y comenzaron maniobras defensivas:
la meleë había atraído a un buen grupo de Corsair, los cuales forzaron una
rápida retirada de los zeros. Un par de los F4U comenzaron a orbitar a baja
altura en torno a ‘Pappy’ y la sorpresa fue mutua al percatarse tanto el As
caído como los pilotos que lo cubrían, que el tipo en el agua saludando era
efectivamente su jefe y que los aviadores en los cazas eran sus subalternos del
VMF-214. Mientras el maltrecho Boyington se las arreglaba para subir a la
balsa, su XO radiaba un mensaje urgente solicitando un hidroavión de rescate,
el cual fue contestado afirmativamente. Quizá este sea el momento que mayor
parecido guarde con alguna de las inverosímiles secuencias y aventuras de la
divertida serie de TV de los ’70, solo
que aquí no hubo el típico final feliz de Hollywood, ya que a los Corsair que
montaban guardia sobre su caído líder eventualmente se les agotó el combustible
y se vieron obligados a emprender el regreso sin haber visto nunca al hidro
prometido. Así, Ashmun y Boyington se transformaron en el 7° y 8° pilotos que
el VMF-214 perdía definitivamente en este período.
PRISIONERO,
HÉROE, PARIA Y HÉROE OTRA VEZ...
Solo
una hora desde que el último F4U desapareció del área, emergió un submarino
japonés a poca distancia de la balsa de Boyington tomándolo prisionero y
llevándolo a Rabaul. Allí sufrió en carne propia, no solo los clásicos y
brutales interrogatorios nipones sino también los continuos ataques aéreos
aliados. Pero dentro de su predicamento, Greg tuvo un giro afortunado, el intérprete
de sus interrogadores fue Edward Chikaki Honda, un civil nacido en Hawai y
graduado de secundaria allí antes de ir a la universidad en Japón. Al mes y
medio Honda hizo arreglos para trasladarlo junto a otros 6 aviadores
prisioneros a la base naval de Truk, gestión que les salvó la vida, pues
seguramente tras obtener la información requerida los iban a fusilar. En Truk
llegaron vía aérea en un ‘Betty’ y apenas arribaron, experimentaron un
virulento raid aéreo de la fuerza de portaaviones del USN (estilo Pearl
Harbor). Honda les salvó la vida por 2ª vez al ayudar a los prisioneros
amarrados y vendados a llegar a una trinchera. El comandante local los encerró
a todos en una pequeña celda de madera (como la del film "El puente sobre
el río Kwai"), donde pasaron todo tipo de privaciones durante 16 días.
Finalmente
los trasladaron vía marítima a Japón, al campo de prisioneros de Ofuna en las afueras del
puerto-ciudad y base naval de Yokohama el 7-03-‘44 donde pasaría los siguientes
11 meses en medio de un alienante y constante rotativo de palizas,
interrogatorios y hambrunas, pero la suerte del rudo Marine tuvo un giro
positivo cuando fue designado ayudante de la cocina del campo, allí trabó
amistad con la cocinera (Oba), una abuelita japonesa que lo ayudó a hurtar
porciones de comida, con lo cual fue recuperando una parte de los 40 kilos de
peso perdidos desde que había caído prisionero y si bien los malos tratos no
pararon, estar alejado del trago y tener algo más de alimento convirtieron este
duro lapso en la vida de ‘Pappy’ en su rehabilitación del alcoholismo. Allí
también fue testigo privilegiado de las incursiones de los B-29 de la USAAF
tanto de bombardeo convencional como incendiario en la cercana Yokohama.
De Rabaul a Truk Boyington y otros aviadores aliados prisioneros fueron trnasportados en un G4M 'Betty' |
Luego
‘Pappy” fue transferido el 16-04-’45 al vecino campo de prisioneros de Omori,
una localidad rural, allí se hizo amigo de un tripulante de B-29 Ray ‘Hap’
Halloran, quien sería su mayor amigo hasta su muerte. Esa y otras amistades lo
ayudaron a sobrellevar el cautiverio, pues estando en Japón sus posibilidades
de escapar eran nulas, de hecho la única forma de saber como iban la guerra era
la llegada de nuevos prisioneros y que los obligaran ir a limpiar escombros de
los cada vez más continuos bombardeos y a cavar largas zanjas y refugios en
torno a la ciudad. Aún así, cuando trascendió la rendición de Japón (y antes les llegó el
extraño rumor de una ciudad arrasada con una sola bomba), no tenían idea clara
de lo que pasaba, salvo que sus crueles carceleros se habían esfumado, hasta
que vieron aviones de reconocimiento del USN y luego aviones de la USAAF les dejaron
caer contenedores con comida y medicinas. Luego el 28-08-’45 un avión del USS
Yorktown pasó lento, a baja altura, dio un par de vueltas y les dejó caer un
paquete con el siguiente mensaje:
“Hola
muchachos. Para mañana ustedes serán libres… nuestros aviones han aterrizado en
un campo cercano. De vuelta en casa denles a las chicas un beso por mí. Mucha
suerte, Dios los bendiga. Alférez L. Komisarek”
La
algarabía se apoderó de los internos de Omori, al mismo tiempo las fotos
tomadas por el Alférez Komisarek mostraron varias frases en los techos de las
barracas indicando la condición de campo de prisioneros y una frase: “Pappy
Boyington here!”, tras lo cual fue
recogido por una partida del USN el 29-08-’45 y despachado al barco hospital
USS Benevolence y de allí a Pearl Harbor, luego a USA (a bordo de un C-54,
ahora nadie le negaba transporte expreso), donde la noticia de su hallazgo en
poder de los japoneses era noticia de 1ª plana. Muy sorprendido a su arribo el
12-09-’45 se encontró con que había sido condecorado en ausencia con la Medalla
de Honor del Congreso (CHM) y la Cruz Naval del USN (UNC). Ni corto ni perezoso
hizo además el informe y reclamo de los 3 derribos del 3 de enero de 1944, los
cuales le fueron reconocidos sin problema, por existir reportes previos de
otros pilotos y tripulantes estadounidenses que estuvieron cerca de la singular
acción ese día (2 contra 20) y que atestiguaron ver caer a lo menos 3 aeronaves
japonesas diferentes, elevando a 22 su total con el VMF-214, pero aún hay quienes
piensan que Pappy solo obtuvo 2 victorias y que tomó el crédito por el derribo
obtenido por el fallecido Ashmun, sin embargo a no ser la díscola y ambiciosa
personalidad de Boyington, no hay data que avale esta ponencia.
Telegrama
que dió cuenta del hallazgo de Boyington con vida en Japón.
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Durante el viaje a USA, un repuesto Greg toma por algunos minutos los mandos del C-54 que lo transportaba a él y otros ex-prisioneros a casa. |
En
San Diego entrevistado a la bajada del largo vuelo desde Hawai.
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La solicitud oficial y formal para la Medalla de Honor del Congreso estadounidense de parte del USMC. |
En
los jardines de la casa blanca, recibiendo la CHM por el presidente Truman.
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Luciendo
(algo incómodo) la más alta condecoración de su nación.
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Boyington recibiendo del propio Comandante en Jefe del USMC, Gral.Van Dergriff la Naval Air Cross. |
Así,
el 5 de octubre de 1945 recibió del propio presidente Truman su CHM; en medio
del júbilo y el patriotismo generalizado por la victoria, nadie objetó su
reclamo por las supuestas 6 victorias con el AVG y tras firmar el informe
oficial por las acciones de su último combate, q’ de paso agregaba otras 3
supuestas victorias aquel día de enero, elevando su palmarés final a 28
victorias… total el papel aguanta mucho, esto habla bastante mal de la
honestidad de Gregory Boyington. Reitero que su total final más aceptado (y
homologado) actualmente es de 22 victorias (2 con el AVG y 20 con el Black
Sheep).
En
su defensa solo puedo conjeturar que tras 19 meses de miserias y desesperanzas
en tierras hostiles, tanta atención y devoción pública a su estatus de héroe
nacional, se le deben haber subido muy rápido a la cabeza y claro se sintió con
derecho a exagerar un poco y reclamar aquellos derribos probables que él sentía
como “seguros” y que por un motivo u otro no le fueron confirmados por la
orgánica del AVG primero y por el USMC después. Pero pasados los desfiles y la
gira final de promoción de Bonos de Guerra, Boyington fue cayendo rápidamente
ladera abajo: ya en el tour nacional de bonos gubernamentales volvió a sus
viejos hábitos de la preguerra y el AVG: abuso de alcohol y las mujeres
(solteras o casadas), incluso se recuerda que en una ocasión dio un discurso
absolutamente borracho ante una gran audiencia (¿alguien vio “Las banderas de
nuestros padres”?) mientras la prensa amarilla (y la no tanto también)
festinaba con su escándalo amoroso al casarse con Frances Baker en enero de
1946, dejando plantada a la “musa” inspiradora del famoso (y expúreo) Corsair
con nombre y 20 victorias: Lucy Malcomson. Así las cosas no fue algo extraño
que el USMC lo diera de baja finalmente en 1947, aludiendo a “razones médicas”.
La vida le sonreía de nuevo al rudo Marine, en 1946 se casó con Frances Baker, pero esta aventura matrimonial tampoco fructificó. |
Después
de eso pasó de trabajo en trabajo por años, nunca pudo conservar uno por mucho
tiempo, incluso aunque su vida seguía marcada por el alcoholismo consiguió
trabajo en una cervecería (increíble, pero cierto) empleo que también perdió,
lo único constante era su actividad como referee de lucha libre, circuito
amateur donde aún era una celebridad. Las cosas mejoraron para él en julio de
1958 con la publicación y éxito masivo de su libro de memorias: “Baa baa Black
Sheep”. En 1959 se casó por 3ª vez, con Dolores Shade, sin éxito tampoco. Los
años ’60 fueron un periodo realmente malo para Boyington, pues a su endeble
economía personal se sumó el alejamiento y ostracismo de su propio hijo
(enlistado en la USAF), otra vez el tema de la infidelidad le pasaba cuentas,
estaba en suma, bastante lejos del clásico “Sueño Americano”.
Arriba y abajo: la portada original de su libro de memorias y la foto de contraportada con una dedicatoria a un compañero del VMF-214. |
Pappy pilotando un bimotor civil en 1959, 14 años después de la guerra, "es como volver a la bicicleta, nunca olvidas como es". |
Antes del alejamiento definitivo con su hijo mayor, tuvo el orgullo y alegría de verlo convertido en oficial de la USAF. |
Su
único punto alto fue algo relacionado con su estatus de excomandante del
VMF-214, al ir a visitar y apoyar a los miembros activos del VMA-214 que
operaban A-4C Skyhawk en Chu-Lai en Vietnam, donde fue muy bien recibido. No
fue hasta mediado de los ‘70s cuando Universal Studios produjo la ya citada y
famosa serie de TV y ‘Pappy’ ganó su mayor fama, la cual perdura hasta hoy
gracias a las 2 temporadas que estuvo al aire y a las regulares y aún populares
reposiciones del show alrededor del mundo. A riesgo de parecer recalcitrante,
debo recalcar (para quien no la haya visto aún) que la serie es lo que hoy se
denomina una versión “muy libre” de las memorias de Boyington, desapegada a los
hechos y a la veracidad histórica, con el fin único de entretener con “relatos
de combate” y situaciones de comicidad asociadas al diario vivir de los Marines
en las Salomón, coqueteando con la categoría de comedia militar, muy lejos de
actuales producciones como “Band of Brothers”, “Dark Blue World”, “For those
that we love” o “The Pacific”, aún así sigue siendo popular.
El
ayer y el presente de Boyington se reencuentran al subir al cockpit de un F4U,
no cabe duda que la serie de TV no solo le trajo fama y atención de los medios,
sino muchos buenos recuerdos.
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Invitado
estelar desde entonces en cuanto Airshow se hacía en USA y vendiendo copias
autografiadas tanto de un arte donde se mostraba su derribo (en el expúreo #
86) y copias de su autobiografía..
|
Bien,
como ya cuenta más arriba, la distorsionada caricatura con que el show de TV
presentó de los miembros del escuadrón le costó la amistad con varios de sus
antiguos camaradas de armas, quienes culparon a Boyington de dar licencia para
tal imagen de inadaptados (ya que el figuraba como consultor histórico), pero
la verdad lo que más hizo ‘Pappy’ fue ayudar al actor que lo encarnaba en
pantalla (Robert Conrad) a meterse en su papel, contándole mil anécdotas de su
servicio en el Pacífico. De hecho se hicieron buenos amigos, lo cual ayudó al
nuevo estatus de celebridad de Boyington, lo cual realmente le hizo mejor la
vida económicamente hablando. Desde entonces fungió como presentador e invitado
tanto en Shows Aéreos como programas de televisión, eventos sociales y
comunitarios, de hecho había dejado la bebida y estaba sobrio y a gusto con su
4ª esposa! (Josephine Moseman). Todo iba mejor y los nuevos ‘80s le sonreían,
incluso parecía que dejaba atrás su vida de verdadera oveja negra, cuando le
diagnosticaron cáncer.
Como
siempre ‘Pappy’ dio la batalla valientemente, pero fue de nuevo como un 3 de
enero de 1944, solo que en cámara lenta, al final la enfermedad lo derribó del
firmamento de la vida el 11-01-‘88, pero no sin antes haber sido reconocido por
su nación y sus pares como el fundador de una leyenda moderna (y sus faltas
perdonadas).
Al
morir ‘Pappy’ sus restos fueron llevados desde Fresno, California en DC-9 hasta
Washington DC al Cementerio Nacional de Arlington (un lugar muy lindo e
impresionante debo decir), donde fue sepultado con honores el 15-01-’88,
descansa así –al fin- la legendaria Oveja descarriada, descansa en paz ‘Pappy’.
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